lunes, 28 de febrero de 2011

No me digas que no

No me cambies el rock por baladas,
ni mis paseos al sol por solitarios caminos.
No me cambies mi whisky por agua salada
ni mis ropas bonitas por andrajos perdidos.
No me cambies restaurantes,
por bares con extrangeros,
no me cambies confidencias
por charlas con camareros.
No me cantes la canción
que tantas veces he escuchado,
no me mates la ilusión,
que ya no estoy tan bien armado.
No transformes mis pasos
por carreras sin destino,
no me cambies mi sobriedad
por ebrias locuras de un niño.
No despiertes con el alba
que marca el inicio de tu andada,
no despiertes mi sueño aún vivo
si ya no tengo tu mirada.
No limpies nuestra cama
si de ti algo le queda,
no me roces con caricias
pues me duelen y me queman.
No me digas que me calle
mientras cuentas los recuerdos,
no me pidas que no llore
mientras lloras en el puerto.
No me jures que escribirás
pues serán palabras difuminadas,
no me digas adiós
si no volverás mañana.
No me digas que no!
No me digas que no...